¿eres protagonista?
Podríamos añadir a estas claves que me vienen hoy a la cabeza el “con o sin ayuda”, dependerá de ti y de otros factores. Tanto valor hay en pedir ayuda, como en organizarse para la autosuperación y el aprendizaje. No obstante, la clave principal reside en ti, porque con ayuda pero sin ti, tampoco conseguiremos nada. Así que puedes:
– decidir quién eres y cómo mostrarte al mundo
– prepararte y superarte
– buscar tu diferenciación
– gestionar un alto porcentaje de tu tiempo
– disfrutar y centrarte en aquellos que te hacen feliz
– poner prioridades en tu vida
– seguir tus valores y/o crear nuevos
– mejorar en la gestión de tus interacciones
– captar la atención de alguien
– decidir en qué quieres invertir tiempo y energía
– establecer caminos que no quieres tomar
– establecer y crear caminos que quieres
– verte como una víctima o como un luchador
– parar, acelerar o desacelerar cuando te apetezca
– depender, abandonar o tomar las riendas de tu vida
– aprender
– decidir en qué te quieres comprometer
– mostrar lo mejor de ti
– aceptar que tenemos cosas que mejorar
– ser lo suficientemente exigente contigo y con los demás para conseguir superación
– organizarte para llegar a todo
– permitirte no llegar a todo
– darte permisos en general
– abandonar, seguir o reorientar la situación
– decidir qué te importa y qué no
– asumir las consecuencias de tus decisiones
– llamar la atención sobre lo que te molesta o lo que te ilusiona
– centrarte en los posibles
– compartir o reservarte
– ser responsable de ti
P.D. Los extremos de “yo solo puedo hacerlo todo” o de “yo no puedo hacer nada” pueden causar efectos secundarios, que requerirán, entonces sí, irremediablemente ayuda de un profesional. El consumo moderado de tu “yo” y una actitud protagonista en la vida te ayudarán enormemente en tu equilibrio y felicidad.
Tus pies son tuyos ¿los diriges?